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Posted by : liqe_lisëe
miércoles, 10 de septiembre de 2014
Nombre: Cartas
Serie: Vocaloid
Pareja: KaitoxLen/KaitoxRin/LenxRin
Género: Rómantico
Extensión: One Shot
Autor: Alice Mefisto-feles Trapnezt
Serie: Vocaloid
Pareja: KaitoxLen/KaitoxRin/LenxRin
Género: Rómantico
Extensión: One Shot
Autor: Alice Mefisto-feles Trapnezt
Disculpa mi atrevimiento pero simplemente no podía
callarme esto por más tiempo. Hay cosas que simplemente están fuera de nuestras
manos y lo que ocurrió conmigo aquella tarde de Noviembre mientras te veía
pasear en el centro comercial realmente estuvo fuera de mis manos. A pesar de
que nos conocemos indirectamente hace tiempo en ese instante pude darme cuenta
de que simplemente eres la criatura más hermosa que he visto en mi vida, tus
ojos dorados, tu piel nívea y tu cabello rubio
hacen que me pierda una y mil veces en tu presencia.
Se que eres aun muy joven y eso embarga mi alma. Tu
ternura e inocencia me ha llevado a amarte en secreto, a adorarte cada que te
cruzas en mi camino y a querer tenerte a mi lado.
S.K
La pequeña Rin
sostenía entre sus manos una carta anónima que había encontrado en el buzón de
sus zapatos a la salida de la escuela. Era algo realmente sorprendente ya que
nunca creyó que a alguien como ella pudiera pasarle algo así. Su pálido rostro
se sonrojo al leer cada palabra de aquel trozo de papel, la letra perfectamente
trazada con tinta azul le parecía simplemente hermosa y aquellas palabras tan
dulces y directas la llenaban de mil sensaciones extrañas.
- ¡Hola Rin! - la
voz de la pequeña Luka la hizo despegar la vista de aquella hoja de papel.
- ¿He? Hola Luka-
respondió con una sonrisa realmente brillante
- Y dime ¿A que se
debe tu tan buen humor?-
- No lo vas a creer
pero… recibí una carta de amor -
- ¿De amor has
dicho?¡Haber muéstramela! - Pidió la mayor llena de entusiasmo la menor entrego
sin dudar la carta a su mejor amiga que la leyó en un segundo. Ambas chicas
saltaron de emoción ante tal suceso.
Rin Kagamine se
encontraba en primer año de secundaría y en general era una chica muy sociable,
alegre y llena de deseos por superarse a sí misma, sin embargo aún era muy
joven para considerarse una experta en el amor y es que hasta ese momento la
única experiencia de aquel tipo que había tenido fue en el jardín de niños
cuando al escuchar a unos chicos mayores hablar algo relacionado con "ser
novios" y amarse mutuamente expresándose su amor de diversas formas
despertó en ella la curiosidad por sentirse "amada" y experimentar
aquello a lo que los jóvenes se referían, por lo que había prácticamente obligado a su hermano
gemelo Len Kagamine a ser su "Novio", aquella extraña e infantil relación
duro unos cuantos años en los que inocentemente se tomaban de las manos y se
besaban en las mejillas para demostrar al mundo que se amaban, sin embargo fue
cunado ambos comenzaron en ultimo curso de primaría que aquella relación
termino pues ambos fueron consientes de que una relación entre hermanos era
imposible y que el amor que sentían el uno por el otro era simplemente un amor
fraternal y nada mas. Pero en esta ocasión alguien se presentaba ante ella para
confesarle su total admiración y amor, un amor verdadero y no una fantasía
infantil, lo que la llenaba de emoción y alegría. Luka era un par de años mayor que ella pero
aun así eran muy buenas amigas y compartían todo, por lo que la noticia del
admirador secreto también la lleno de emoción.
- "Sé que eres
muy joven y eso embarga mi alma" … esto quiere decir que tu admirador es
mayor que tú. Eso es genial - deducía la peli-rosa
- Lo se. Pero … no
tengo idea de quien pueda ser - por más que Rin trataba de adivinar de quien se
trataba, ninguna persona se cruzaba en su mente. Conocía a muchos chicos
mayores que cursaban incluso la preparatoria en el mismo instituto así que
podía ser cualquiera - S.K ¿Quién podrá
ser?
Aquellas iniciales
realmente no le decían mucho así que realmente no había mucho que pudiera hacer
simplemente esperar. Cuando llego a casa se dirigió de inmediato a su
habitación sin prestar atención a quien estaba en su casa. Entro y tiro su
mochila en el piso, se dirigió a la cama y se tiro boca abajo hundiendo su cara
en la esponjosa almohada de plumas, en su cabeza daban vueltas todas aquellas
dulces palabras y las iniciales al pie de la hoja, el color de tinta era
inusual pero tampoco conocía a quien utilizará un bolí de ese color, azul rey.
Se quedo dormida tratando de adivinar de quien se trataba. El movimiento del
colchón la hizo despertarse rápidamente, no se alarmo por que sabia muy bien
quien era la única persona que entraba a su habitación con tanta familiaridad.
- ¡Hey Rin! -
- ¿Qué pasa Len?-
- Hoy no me
esperaste para volver juntos a casa ¿Pasa algo?-
- Ah. Lo siento vine
con Luka.
- Ok no hay
problema- le respondió su hermano menor sin preocupación
- ¿Oye Len?-
- Dime… -
- Mira lo que me ha
llegado hoy- le dijo mientras entregaba el trozo de papel blanco que estaba un
poco maltratado por haberlo doblado y desdoblado varías veces.
Len leyó
tranquilamente la pequeña carta, sonrió amargamente y soltó un largo suspiro.
- Vaya que suerte
tienes Rin. Me gustaría tener un admirador secreto - dijo con un poco de celos
- ¡Admirador! -
repitió sorprendida la chica mientras se levantaba para ver a su pequeño
hermano a los ojos.
- Bueno ya sabes.
Una chica claro. Pero que me envié cartas tan lindas como esta-
- Ya veo. Me habías
asustado hermanito-
Aquella noche como
hacían muy seguido ambos durmieron en la misma cama, abrazados el uno del otro
protegiéndose y calentándose mutuamente. La mañana llego rápidamente y el sol
atravesó la delgada cortina de velo blanco
que cubría la ventana de la habitación. Len fue el primero en despertarse, se
levanto y preparo un desayuno ligero para dos, lo coloco cuidadosamente en una
charola de plástico y regreso rápidamente a la habitación de su hermana se
introdujo nuevamente entre las sabanas y la despertó para que pudiesen
desayunar juntos. Terminaron su comida y se alistaron para ir a la escuela.
Como siempre llegaron juntos.
Las clases avanzaron
como cada día con un ritmo perezoso. A la hora del almuerzo Rin y Len se
sentaron debajo de un gran árbol de cerezos sin platicar realmente de nada, era
la ventaja de ser gemelos que sin palabras eran capaces de entenderse el uno al
otro, era como ser un solo ser dividido en dos pequeños cuerpos que
exigían simplemente permanecer juntos. A
la salida Len se quedo pues era parte del
equipo de basquetbol de la escuela, en ocasiones Rin lo esperaba y otras
se iba con Luka. Ese día había quedado de ir por un helado con su amiga por lo
que al terminar las clases se despidió de su hermano y se dirigió a su locker
para cambiarse los zapatos.
- ¿Lista Rin? - como
siempre la peli-rosa estaba esperándola.
Cuando abrió la
pequeña puerta un sobre blanco callo al piso haciendo que ambas chicas se
quedarán congeladas observando el sobre intacto en el suelo. La mayor se agacho
a levantarlo rápidamente y se lo entrego a su amiga que tenia el rostro
completamente rojo y el corazón latiendo a cien, la rubia tomo el sobre y lo
abrió cuidadosamente. De nuevo el mismo color de tinta y los mismos trazos
finos y elegantes sobre el papel blanco.
Verte en el descanso al pie de aquel árbol de cerezos
simplemente hizo viajar mi imaginación a un futuro ficticio en el que ambos
pudiésemos compartir aquel escenario. Mi
corazón se detenía cada que e viento soplaba y movía los mechones rubios de tu
pelo en mi dirección y me llevaba en pequeñas dosis aquel aroma que tu cuerpo
despide de manera natural y que consigue hacer corto circuito en mis sentidos.
Me siento como un monstro al desear con tanta fuerza
poder tenerte a mi lado. Se que no es correcto pero tu me haces olvidar la
diferencia entre lo correcto y lo incorrecto, simplemente tú con aquella estela
angelical.
S.K
Breve, romántica y
emotiva. Aunque fuese pequeña aquella carta había conseguido acelerar y detener
el corazón de la pequeña Rin.
Aquella noche soñó
con su admirador secreto, aunque le fue imposible ver su rostro simplemente
tenia una idea clara de un joven mucho mayor que ella que llegaba a su lado y
la besaba apasionadamente. Aunque se tratará de un sueño aquella experiencia
era simplemente fantástica. Y le provocaba la necesidad de averiguar cuanto
antes quien era aquel admirador secreto.
Al día siguiente en
la escuela Rin planeo al lado de Luka un pequeño plan para descubrir de quién
se trataba, como era de esperarse Len había sido arrastrado a aquella
situación.
- Bien repasemos en
plan. Fingiremos que estamos haciendo una encuesta de satisfacción del servicio
de la escuela, para eso utilizaremos los formatos que me he preparado ayer por
la noche. Únicamente encuestaremos a
nuestros conocidos, ya que el "hombre misterioso" esta entre ellos.
¿Dudas?-
- No señora -
Contestaron a la vez los gemelos.
Así comenzaron su
travesía tratando de desenmascarar al Admirador secreto. Comenzaron con sus
amigos del salón de Luka omitieron a su propio salón por dos razones, la
primera era obvio que dentro de su grupo no se tragarían aquello de la encuesta
y la segunda sabían por lo dicho en la primer carta que el chico en cuestión
era mayor que Rin.
Al finalizar el día
habían a menos entrevistado a cuarenta y cinco chicos diferentes. Y simplemente
no habían obtenido nada, ni una pista o un resquicio de quien se trataba. Había
a menso catorce chicos que escribían muy parecido a la letra de las cartas pero
que no eran iguales y además como la encuesta se había realizado en horario de
clases todos habían utilizado bolí negro. Hasta ese momento la única certeza
que tenían y que realmente no les ayudaba en nada era que el 90% de los
encuestados estaban completamente satisfechos con los servicios brindados por
la institución.
- Imposible. Esto es
imposible -
- Es cierto
hermanita, no creo que esta haya sido una buena idea - le apoyaba el menor
- Calma chicos ya se
me ocurrirá algo.
Era bastante tarde y
la escuela estaba casi vacía. Los tres chicos se dirigieron a los casilleros y
al abrir la puerta del de Rin no solo cayo una carta si no también una Rosa
azul.
Esta flor puede resultar hermosa pero es artificial
al igual que todo lo que hay en este lugar, las personas, las cosas, todo es
falso y vacío de vida, excepto tu. Eres la única criatura natural y realmente
viva en este lugar, con tu sonrisa me contagias un poco de aquella vida y
energía que te caracteriza siempre y cada día.
No puedo seguir así. No puedo continuar embriagándome
con tu perfección a distancia. Quisiera tenerte entre mis brazos y poder
susurrar a tu oído cuanto te amo. Cuanta pasión despertaste en mi tan solo con
mirarte, con haber rosado tu piel esta mañana cuando te acercaste a mi, a pesar
de que debía concentrarme en lo que me pedías mi mente simplemente no podía
dejar de divagar en la perfección de tu ser. Lo siento tanto pero haces que
pierda el control.
S.K
- ¡Bingo! A menos
sabemos que si es uno de los que contestaron la encuesta falsa- canto
victoriosa Luka
- Si es uno de los
mas de 40 chicos de secundaría y prepa que entrevistamos este día - remarco Len
con un tono sarcástico
- Tienes razón
hermano. Aunque sepamos eso aun son muchos chicos como para saber con exactitud
de quien se trata.
Lo que había traído
un poco de esperanza ahora los volvía a ahogar en esa probabilidad de 1/45. Justo cuando salían de la escuela una
chica de pelo marrón se acerco rápidamente a ellos.
- Disculpen. Me
llamo Meiko Sakine tengo 16 años y soy
alumna de la preparatoria clase 2. quisiera pedirles un gran favor - Los tres
chicos se sorprendieron pero la escucharon - Verán mi grupo tiene que hacer una
remembranza de la escuela y necesitamos el apoyo de chicos de todos los
niveles. Disculpen que se los pida de repente pero… tenemos que entregarlo
mañana y estamos un poco desesperados - Finalizo la chica al tiempo que hacia
una reverencia avergonzada.
- Claro que te
ayudaremos - Respondió Rin sin titubear y sin preguntar a sus acompañantes. Era
característico de ella tomar decisiones por los demás.
Siguieron a la chica
en silencio hasta su salón que se encontraba en el tercer piso del edificio de
preparatoria. Al entrar se encontraron con varios chicos y chicas que
trabajaban arduamente. El trabajo que debían hacer era prácticamente sencillo,
solamente debían contar su experiencia como alumnos de secundaría a los demás
para que ellos pudiesen redactar un pequeño reportaje. Aquello había resultado
una experiencia muy divertida para los tres y una oportunidad de conocer gente
nueva y convivir con algunos chicos que conocían de vista pero que en aquel
momento estaban en total disposición de conversar.
Justo cuando el
trabajo estaba por terminar Luka platicaba con un chico de pelo y ojos azules.
Era un chico apuesto y muy serio, llevaba la ropa perfectamente cuidada y tenia
un estilo muy elegante, extra a su uniforme llevaba una bufanda azul delgada en
el cuello y las uñas de las manos pintadas del mismo color.
- Eres muy
divertido…. Eto… ¿Cómo me has dicho que te llamas? - Luka solía ser muy
distraída para las cosas importantes como esa.
- Soy Kaito Shion -
- Lo siento
Shion-San, soy mala para recordar los nombres-
- Jajá no hay
problema.
- Disculpa
Luka-chan ya es hora de irnos, mi
hermanita nos espera- le dijo Len en un tono cortes.
- ¿He? Claro.
Disculpa Shion-san tengo que irme pero me gustaría que me pudieran compartir
más de tu poesía por que es muy linda- dijo la peli-rosa mientras buscaba un
bolí en su mochila - Lo siento. Quería darte mi e-mail pero no tengo con que
escribirlo- Kaito parecía petrificado, incapaz de responder - ¿Shion-san se
encuentra bien? - Le llamo la chica un poco preocupada
- Si… si lo siento
¿Qué decías? - respondió por fin el chico que parecía haber despertado de un
trance.
- Le decía que si me
podía prestar un bolí para anotarle mi e-mail y así pudiera compartirme algunos
otros poemas suyos-
- Ah claro - el
joven metió la mano descuidadamente en la bolsa de su pantalón y saco el único
objeto que llevaba en el. Un Bolí plateado por fuera y con la punta muy fina -
Aquí tienes - dijo extendiendo en tubo metálico a la chica - ¿Disculpa no me
presentas a tu amigo?
- Si. Disculpe mi
falta de cortesía. Él es Kagamine Len, de primer año de secundaría.
- Es un gusto
Kagamine-kun- dijo estirando la mano al pequeño adolescente rubio que lo miraba
amablemente.
- Lo mismo digo…
pero ya nos conocíamos Shion-san, aunque tal vez no formalmente - respondió el
pequeño cortésmente - Hace un año su equipo jugo contra nuestro equipo de
basquetbol, es usted un muy buen jugador - comento.
- Ya veo, también lo recuerdas - respondió el
peliazul que aun no soltaba la mano del pequeño.
-¡LEN! Le llamó
realmente sorprendida Luka mostrándole el trozo de papel que sostenía en su
mano, en el se veía su dirección e-mail escrita con su característica letra
grande y redonda, pero en un segundo el chico se dio cuenta de que no se
refería a lo que había escrito en la hoja, si no al color de la tinta, azul
rey. Ambos abrieron los ojos realmente sorprendidos y compartieron una mirada
de complicidad.
- Bueno Shion-san
tenemos que irnos - dijo nerviosamente Luka mientras jalaba a Len del Brazo
para salir corriendo disparados.
Kaito se quedo de
pie completamente confundido por la extraña huida de los dos jóvenes, sin
embargo de momento todo tomo sentido cuando vio el papel en su mano y el bolí.
Ambos habían visto aquella tinta y sabían que el bolí pertenecía a él.
- Lo juro Rin tu
hermano también lo vio. El bolí de Shion-san tenia la tinta del mismo color
azul. Sin duda es él ¿Verdad Len? - le llamo la chica realmente extasiada. Pero
Len estaba un poco ido - Len te estoy hablando-
- ¿He? - reacciono
finalmente el pequeño
- Le decía a Rin lo
de la tinta del bolí de Shion-san- repitió con un poco de enfado la chica.
- Si. Sin duda es él
- dijo el chico muchísimo menos animado.
- No puede ser.
Shion Kaito de preparatoria. No puede ser - Trataba de comprender la chica.
Aquella noche como
muchas Rin y Len durmieron juntos, aunque Len realmente no durmió. Una parte de él se sentía realmente
insatisfecha del resultado de su investigación, no podía creer que aquel chico
fuese el admirador secreto de su hermana. Recordó el día en que conoció por
primera vez a Kaito.
>>Flashback<<
La tarde era
calurosa y el uniforme del quipo de basquetbol de la primaria que llevaba puesto estaba
empapado de sudor a pesar de que aun no había comenzado el partido. Era un
chico muy apasionado por el deporte por lo que en su afán por dar siempre lo
mejor de sí mismo entrenaba incluso antes de cada encuentro. Aquel día deberían
enfrentarse al equipo de la secundaría y estaba bastante nervioso.
Salió a la cancha
del encuentro y fue allí cuando lo vio. Aquellos profundos ojos azules se
clavaron en los suyos como si quisieran indagar en su alma, estaba realmente
embelesado con la imagen de aquel chico alto y atractivo justamente frente a
él. El silbatazo de inicio acababa de sonar y el balón llego a sus manos, trato
de acercarse a la canasta contraría pero el joven ojiazul lo intercepto
robándole el balón sin el mínimo esfuerzo. Después de eso les fue prácticamente
imposible recuperar el balón dejándolos sin oportunidad de juego y llevándolos
a perder con un marcador de 65- 0.
Al finalizar el
partido se había quedado de rodillas en medio de la cancha sintiéndose
derrotado e inútil. En ese momento una fuerte mano se acerco a el para ayudarlo
a ponerse de píe, era aquel chico de ojos azules que le sonreía amablemente
mientras lo ayudaba a ponerse de píe. Ante esto su corazón se agito mucho más
que a mitad del partido. El calor de la mano de aquel joven mayor que él era
simplemente magnético y lo invitaba a no separarse de él.
"Buen trabajo.
En el futuro serás un gran contrincante"
>>Fin de
Flashback<<
"¿Por qué tenia
que ser Kaito-san?" pensó mientras una lagrima rodaba por su mejilla.
-------------
Al día siguiente Len
se negó a ir a la escuela alegando que se sentía mal, cosa que Rin creyó sin
cuestionar puesto que realmente su hermanito estaba más pálido de lo normal.
Rin llego bastante alegre a la escuela embriagada por la ilusión de que el superior
Kaito estuviese enamorado de ella. Las clases transcurrieron más rápido de lo
habitual. Y fue corriendo con entusiasmo a abrir su pequeño locker del que de
inmediato callo un sobre blanco. Se apresuro a tomarlo y leyó la carta que en
esta ocasión aparte de linda le resulto un poco confusa.
Se que a estas alturas debes saber muy bien quien
soy. No me preocupa ni me asusta, al contrario me llena de una extraña
satisfacción la idea de no tener que esconderme más. Debo decir que escuchar tu
nombre por primera vez me provoco una extraña sensación de confort, ya que
anteriormente solo conocía tu apellido. Tocar tu mano de aquella forma tan
personal casi hizo que mi corazón se detuviera y comenzará a andar al mismo
tiempo. En este punto es imposible volver atrás.
Por ello quisiera saber que opinas de esto. Me
gustaría verte el día de mañana en la estatua de Hachiko a las 5:30. Por favor
asiste únicamente si tengo alguna posibilidad dentro de tu corazón.
Shion Kaito
Al terminar de leer
la carta Rin solo pensó en mostrársela a Luka, aquella firma solo confirmaba lo
que ella sabia muy bien Kaito-san era su amado secreto. Sabía muy bien que
tiempo atrás no lo había considerado nunca pero también sabía que a partir de la
primera carta el había atrapado una parte muy especial de su joven corazón.
- ¡Luka! Mira esto
…- Grito sin siquiera estar realmente lejos de su amiga. Le entrego la carta
llena de alegría, tanta era su emoción que en ningún momento se percato de la
expresión de su amiga al leer la carta.
- ¿Piensas ir? -
pregunto un poco preocupada la peli-rosa
- ¡¡CLARO!!- grito
entusiasmada la rubia
- ¡¿Rin?! - dijo con
voz baja pero llena de incertidumbre
- ¿Dime? -
- ¿En que momento
hablaste ayer con Kaito-Kun? - indago preocupada la chica
- No. Ayer no tuve
oportunidad de hablar con él - contesto despreocupadamente sin ser consiente a
lo que se refería su amiga. Una punzada surgió en el pecho de Luka que
comenzaba a comprender la situación real.
- ¿Dime conocías de
antes a Kaito? -
- Solo de vista, no
sabia ni siquiera su nombre. Pero … ¿A que vienen tantas preguntas? - pregunto
enfadada.
Luka tenia mucho
miedo e incertidumbre de estar equivocada o de tener razón. Por lo que no podía
dejar las cosas así.
- ¿Rin puedo ir a
visitarte esta noche? Ahora debo irme -
- Claro que si -
respondió bastante alegre la pequeña.
La chica salió
disparada al edificio de preparatoria en busca de Kaito, pero no lo veía por
ningún lado. Busco por todas partes pero parecía no haber señales del chico en
cuestión. En su recorrido se encontró con Meiko y le pidió ayuda para encontrar
al peliazul.
-------------
Rin acababa de
llegar a su casa lo único que quería en ese momento era ver a su hermano. Lo
extrañaba realmente y tenia un presentimiento atorado en el pecho. Eso solo
ocurría cuando su hermano estaba en algún tipo de dificultad o tenia una gran
preocupación. Entro a verlo pero estaba
dormido profundamente, se recostó a su lado y trato de descansar un poco
sintiéndose protegida por su pequeño hermano. Justo cuando estaba a punto de
conciliar el sueño un quejido poco entendible salió de los labios de su gemelo.
- Kai...to ...kun-
susurro y Rin se pregunto ¿Por qué su hermano repetía aquel nombre entre
sueños? Sin embargo no dio gran importancia y se quedo dormida a su lado.
La vibración sobre
el colchón la despertó de pronto. Su móvil recibía una llamada y como estaba en
modo de silencio únicamente vibraba suavemente. Miro la pantalla. Llamada
entrante de Luka.
- ¿Si bueno?
- Rin ¿Por qué no
contestabas? Llevo 15 minutos tocando la puerta y nadie abre.
- Ah lo siento.
Estaba dormida con Len.
- ¿Len esta
contigo?-
- No… bueno si..
Bueno esta durmiendo aún ¿Por qué?-
- ¿Podrías salir tu
sola quiero hablar de algo importante contigo?
- Claro allá voy -
finalizo la llamada despreocupadamente.
Fue a su habitación
y tomo una sudadera amarilla y se la puso escondiendo sus manos en los
bolsillos. Abrió la puerta y se encontró a su amiga de pie con una expresión de
total preocupación en el rostro. La mayor la tomo de la mano y la llevo a un
pequeño café en el centro para poder platicar con tranquilidad.
Una vez ahí Luka
comenzó a contarle lo sucedido, si alguna característica peculiar tenia esa
chica era ser realmente directa con las cosas. Le conto acerca de el día en que
tuvieron que ayudar a los chicos de la preparatoria y como ella había empezado
a hablar con Kaito, se detuvo un poco para ser un poco más sensible y comenzó a
contarle el acercamiento que habían
tenido Len y Kaito aquel día haciéndola notar la similitud de los hechos con lo
descrito en la ultima carta. También le hablo de que ambos chicos ya se
conocían en el pasado y la posible confusión que había surgido con las cartas
puesto que Kaito únicamente conocía el apellido de la persona a la que amaba.
Cada palabra por muy cuidadosa que fuese hería el interior de Rin, todo aquello
aunque fuese extraño tenia más lógica que la idea de que él se hubiese fijado
en ella. Luka tomo su mano y la apretó con mucha fuerza antes de continuar.
- … como no quería
equivocarme. Después de clases he ido a buscar a Shion-san para hablar con él.
Le pregunte acerca de las cartas y acerca de la persona a ala que amaba tan
profundamente. Él me confirmo que … que
estaba profundamente enamorado de Len Kagamine - hizo una pausa para asegurarse
de que su amiga estuviera digiriendo bien aquella situación - Él siempre creyó
que las cartas las había depositado en el buzón de Len y no el en tuyo. Lo
siento mucho - dijo y permaneció callada esperando alguna aportación de su
amiga que estaba en completo shock pero que pese a todo no lloraba.
- Ya veo… - dijo
únicamente.
Las dos chicas
caminaron en silencio de regreso a la casa de la rubia. La mayor la rodeaba con
sus brazos tratando de apoyarla de algún modo, aunque parecía no funcionar
realmente. Más rápido de lo que esperaban llegaron a la casa.
- ¿Quieres que te
ayude a hablar con él? - pregunto cortésmente la peli-rosa
- No gracias. Es
cosa de … Gemelos - respondió la otra sonriendo amargamente.
Rin entro a la casa
que se encontraba a oscuras. Sabía que su hermanito aun no había despertado.
Camino lentamente hasta su habitación y entro en silencio, se sentó en la
orilla de la cama y observo a aquel chico angelical descansar y en ese momento
se percato de algo que no había notado antes de irse. Los ojos de su hermano
estaban hinchados e irritados, había llorado antes de quedarse dormido. Recordó
que cuando llego con el la primera vez lo escucho susurrar el nombre de Kaito.
Una mezcla de alegría y tristeza la invadió repentinamente. Se inclino lentamente y beso tiernamente los
labios de su hermano quién se despertó de inmediato y la observo realmente
incrédulo.
- Hermanita… sabes
que no podemos… -no completo la frase pues se percato de que la chica lloraba
amargamente.
- ¿Len?... ¿A ti te
gusta Shion-san? - pregunto pero no recibió una respuesta concreta. Como en
otras ocasiones, sin necesidad de hablar ambos entendieron la respuesta a esa
pregunta.
La abrazo y no dijo
nada más. Aquella noche ninguno de los dos durmió platicaron acerca del
descubrimiento de Luka y de el dolor que
había sentido Rin al saber que todo aquello había sido un simple error. También
le conto que realmente le dolía menos que la persona que realmente amaba
Shion-san se tratara de su hermano pequeño y no alguien más. Len le conto de
como se conocieron y le platico la forma en que se enamoro de él, esa noche
estuvo llena de muchos sentimientos encontrados por parte de los gemelos. Ambos
lloraron por el dolor del rechazo y por la alegría del amor correspondido, pues
a pesar de que cada sentimiento era de uno solo de ellos, lo compartían en
cuerpo y alma. Cuando el sol comenzaba a salir ambos apenas se quedaban
dormidos.
Aquella infantil
melodía de llamada despertó a Rin. Contesto el teléfono sin siquiera mirar el
número del remitente. Se trataba de Luka que le preguntaba ¿Cómo habían salido
las cosas? En un estado de entre inconciencia le platico lo sucedido y le pidió
que ya no se preocupara que todo estaba bien, que ella estaba bien y que Len
también estaba muy bien. Que juntos habían decidido que hacer y que ambos se
apoyarían como siempre. Cuando colgó se percato de que eran las la una de la
tarde y despertó agitadamente a Len. Ambos sabían bien que debían prepararse
para esa tarde.
Rápidamente la hora
llego. Ambos salieron de la casa tomados de la mano y se dirigieron al lugar de
la "cita". Caminaron lentamente , no tenían prisa disfrutaron de
aquel recorrido juntos y de la sensación compartida de mariposas en el estomago,
justo a pocos metros de la estatua de Hachiko se detuvieron llenos de
nerviosismo y contemplaron a Kaito de pie. Llevaba un traje blanco con una
camisa azul y en sus manos sostenía una rosa también azul. El chico volteo y
los vio a ambos tomados de la mano. Los gemelos se acercaron hasta él que se
encontraba completamente confundido de verlos llegar juntos y de la mano. Justo
cuando estaban al frente de él Rin avanzo lentamente dejando atrás a Ren que
tenia la mirada agachada, se puso de puntitas para alcanzar a Kaito que era
bastante alto.
- Shion-san -
susurro en su oído - Más vale que cuides
mucho de mi hermanito … si no te las veras conmigo - le advirtió mientas
colocaba un tierno beso en su mejilla.
La chica se separó,
echo una mirada veloz a su hermanito y se alejo. Antes de que avanzara tanto
como para tenerlos fuera de su campo de vista volteo por ultima vez y vio como
Kaito se inclinaba para entregarle aquella rosa azul y robarle un beso fugaz de
sus inocentes labios. En ese momento se sintió más feliz que nunca en si vida.
FIN
Lishëe Mefisto-feles Trapnezt (2013)
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
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